
Esas operaciones, además de cumplir las ordenanzas legales y los protocolos nacionales e internacionales que rigen la materia, se hicieron respetando la integridad y la dignidad de las personas.
“En tantos años nunca vi algo parecido”, contó el bombero italiano Fabio Miniato sobre el derrumbe que dejó al menos 226 muertos
ACTUALIDAD12 de abril de 2025
Ni el devastador terremoto que sufrió la vecina Haití en 2010 le ha causado tanta impresión a Fabio Miniato, un bombero que estuvo entre los primeros rescatistas en llegar a la discoteca que se derrumbó el martes en la capital de República Dominicana.
Asegura que entre 15 y 18 minutos después del siniestro ya estaba en la discoteca Jet Set. Lo que encontró le heló la sangre: cuerpos apilados y sobrevivientes que pedían ayuda desesperadamente.
Miniato, un itialiano con 25 años de servicio en el cuerpo de bomberos dominicano, aseguró que “nunca vio algo parecido”. Era “dantesco”.
“En tantos años nunca vi algo parecido, ni en el terremoto de Haití”, relató.
En ese caso, “las víctimas estaban esparcidas en una ciudad completa, (pero en la discoteca) todos estaban concentrados en el mismo lugar”, por lo que la sensación que sintió al verlo fue “muy fuerte”.
Miniato dijo que al llegar al lugar del desastre llamó al jefe de bomberos y pidió una grúa para retirar escombros, mientras daba un vistazo para determinar los “peligros inmediatos” y poner a todo su equipo en marcha.
“El primer rescate son las personas vivas (...) y las que tienen riesgo”, narró este soccorista de 60 años.
Los rescatistas sacaron a 189 personas con vida, según el último balance oficial. 226 fallecieron, entre ellas dos ex beisbolistas, una gobernadora y el popular cantante de merengue Rubby Pérez, que ofrecía un concierto al momento del desastre.
189 personas fueron rescatadas con vida tras el derruembe en el club nocturno Jet Set.
El techo de la discoteca cayó sobre los asistentes y un enorme hueco puede verse desde el aire.
“Había que sacarlo todo (...) para llegar a las personas que estaban en el último nivel”, añadió Miniato.
Otra de las cosas que recuerda son muchos celulares sonando al amanecer entre los escombros.
“Es difícil explicarlo”
Una persona “me estaba gritando que le corte un pie y que lo saque”, rememoró. Y dijo que se debatía entre la desesperación de la víctima por salir y la tensión por evitar más daños.
“Logramos sacarlo todo, se fue con su pie, entonces mucho más feliz que salió entero”, dijo sobre el hombre que le pedía que le mutilara un miembro para extraerlo entre las placas de hormigón. En el mismo lugar dos mujeres y un hombre le pedían ayuda a gritos.
“Hay que vivirlo, es difícil explicarlo”, lamentó Miniato.
Y contó que al llegar a casa su mente revisaba lo vivido y se cuestionaba si pudo haber hecho algo más.
El gobierno dominicano promete una comisión de expertos nacionales y extranjeros para investigar las causas de la que se considera la mayor tragedia en este país caribeño.
“Por suerte nosotros no tenemos que ir a informar a la familia, digo con suerte porque debe ser una cosa muy dura dar esta noticia a familia”.

Esas operaciones, además de cumplir las ordenanzas legales y los protocolos nacionales e internacionales que rigen la materia, se hicieron respetando la integridad y la dignidad de las personas.

La mercancía incautada, se encontraba en el patio de la vivienda, fue posteriormente trasladada a la sede de la 3ra. Brigada de Infantería del ERD., para los fines correspondientes ante las autoridades competentes.

El conductor logró escapar. Había sido detenido en julio pasado en el Puesto de Chequeo Guanito, también por transportar nacionales haitianos indocumentados y se encontraba actualmente bajo una medida de coerción.

Las acciones fueron llevadas a cabo por soldados del ERD en los municipios de Guayubín, Las Matas de Santa Cruz y la comunidad de Mangá, logrando la captura de sesenta y tres (63) hombres y treinta y cuatro (34) mujeres, todos indocumentados.

Más de 2,600 agentes desplegados a nivel nacional para atender cualquier eventualidad

El lamentablemente hecho ocurrió en la vivienda ubicada en la calle Francisco del Rosario Sánchez No. 87, parte atrás, próximo a La Metalera.