Nueva fumata negra tras la tercera votación del cónclave

La segunda y tercera votaciones del cónclave para elegir al sucesor del papa Francisco como sumo pontífice de la iglesia católica  (08.05.2025) se saldaron con una fumata negra, lo que significa que, al igual que en la primera votación, no hay mayoría de dos tercios entre los cardenales para elegir al sucesor de Francisco. El humo comenzó a salir de la chimenea sobre la Capilla Sixtina a las 11:52 horas de este jueves.

Según la normativa vaticana, para ser elegido papa son necesarios dos tercios de los votos. Al ser 133 los cardenales electores, el elegido necesita, como mínimo, 89 votos.

Un espeso humo negro surgió este jueves de la chimenea instalada en el tejado de la Capilla Sixtina, señal de que los 133 cardenales encerrados en su interior fracasaron de nuevo en su misión de escoger a un nuevo papa.

 Las miles de personas congregadas a mediodía en la plaza vaticana de San Pedro acogieron entre aplausos y decepción la segunda fumata negra desde el miércoles por la noche. Los cardenales deben votar de nuevo en la tarde para escoger al sucesor de Francisco.

Los 133 cardenales reunidos en cónclave para elegir al sucesor de Francisco se retiraron a almorzar a la residencia de Santa Marta tras los dos escrutinios de la mañana del jueves, en los que no se eligió a un nuevo papa, y a las 16.30 hora local (14.30 GMT) volverán a la Capilla Sixtina para otras dos votaciones.

Fumata atrae multitudes

Unas 11.000 personas se congregaron este jueves en la plaza de San Pedro del Vaticano y su entorno para ver la segunda fumata del cónclave, que salió negra, por lo que sigue sin haberse elegido un nuevo papa, y se espera que sean muchas más las que se den cita de nuevo en el lugar para la fumata de la tarde. 

Según la Jefatura de Policía de Roma, alrededor de 10.000 personas se reunieron en la plaza, pendientes de la chimenea de la que salió la humareda negra procedente de la Capilla Sixtina, donde los 133 cardenales electores están encerrados para elegir al sucesor del difunto papa Francisco. 

Además, en torno a 1.000 personas llegaron a las calles adyacentes del Vaticano, donde se ha desplegado en un amplio dispositivo de seguridad, entre agentes y controles, con motivo del cónclave.